...una vez, en un lugar, situado cerca de mucho y alejado de todo, los gobernantes cedieron el poder al Poema, dejaron gobernar al Verso...































jueves, 18 de abril de 2013

ME ACOSTUMBRÉ A CONVIVIR CON LA MUERTE A CADA INSTANTE




...me acostumbré...

... a convivir con la muerte a cada instante,
con la naturalidad que las cosas suceden las personas mueren,
como cada mañana se abren las persianas de los comercios
y por la noche se cierran, como los bebés lloran y los vehículos contaminan,
como el hielo enfría y el fuego calienta, como tú dudas,
como tienen cara de gilipollas los que hablan con manos libres,
como el mar no se rinde, como las faldas se suben para volverse a bajar,
como yo soy imperfecto, como los curas se acaban y las limas liman,
como los círculos son redondos y los cuadrados no,
desde que nacemos cada día nos queda menos vida
y me acostumbré a verlo a diario, a veces sin esperarlo
y otras con claridad supina anunciado, la muerte nunca duda
y yo tampoco lo hice a la hora de irme fabricando un traje a medida
que me aislase de las mil caras de la señora de la guadaña
y así, cada vez que ésta osara mirarme al alma tenerla vacunada
para poder aguantar esa mirada con la máxima naturalidad,
como la que cada mañana tienen los comercios abriendo sus persianas
y por la noche al cerrarlas, como los bebés lloran y los coches contaminan,
como el hielo enfría y el fuego calienta, como tú dudas,
como tienen cara de gilipollas los que hablan con manos libres,
como el mar no se rinde, como las faldas se suben para volverse a bajar,
como yo soy imperfecto, los curas se acaban y las limas liman,
como los círculos son redondos y los cuadrados no,
con toda esta naturalidad me acostumbré a convivir con la muerte a cada instante.

El Fisioterapoeta

          BCN, 11 Febrero 2011


1 comentario:

Rosa Sánchez dijo...

Muy bueno, Esteve, y emotivo.
Un abrazo.